El estado de conciencia es aquel en que se encuentran activas las funciones neurocognitivas superiores. El estado de conciencia determina la percepción y el conocimiento del mundo psíquico individual y del mundo que nos rodea.

El estado de conciencia


Existen muchos fenotipos en el estado de conciencia. Ejemplos claros son el estado de sueño y el estado de vigilia.
Los estados de conciencia alterados  muestran la existencia de niveles o fases de vigilia distintas. Estos pueden ser inducidos y alterados de forma artificial o patológica.
§  Inducidos mediante drogas y alucinógenos, o una práctica: discusión, autosugestióndeportehipnosismeditaciónpranayama, arengar.

§ Ser producto de una patologíaagotamientoayunodeshidratacióndrogasesquizofreniaintoxicacionesmaníainsomnio, privación de sueño


1. Los estados de conciencia

se otorga una notable importancia al estudio de los estados de conciencia durante el tiempo en que dormimos y soñamos ,estado de dormir con sueños, , y cuando dormimos y no soñamos ,estado de dormir profundo,además del tiempo en que permanecemos despiertos,estado de vigilia

Mientras dormimos y soñamos  la conciencia muestra un estado que comporta un universo perfectamente válido dentro de su propio marco de espacio y tiempo. Mientras dormimos y no soñamos se pone de manifiesto un estado de conciencia muy distinto; las experiencias sensoriales y las imágenes mentales carecen de contenido específico, se detiene la actividad representacional de la conciencia cognoscitiva  y se impone una especie de paz de las profundidades que caracteriza la conciencia pura  sin conocimiento de lo particular, pero plenamente consciente en Sí Misma.

Cuando la conciencia reemprende su actividad es incapaz de recordar ese estado de dormir profundo del que realmente estuvo ausente.

2. El “cuarto” estado

Además de los tres estados ya señalados  se considera la existencia de un “cuarto” estado (turiya) en el que el sujeto “despierta” de los otros tres. Suponiendo que esos tres estados ,vigilia, dormir con sueños y dormir profundo formasen juntos un largo sueño, turiya (el cuarto) representaría “el despertar” que pone fin a ese sueño. Por ello, se dice de él que es más profundo que el dormir profundo, y al mismo tiempo más despierto que el estado de vigilia. Ramana Maharshi se refiere a turiya como el estado de “dormir-despierto”

3. Ilusión e ignorancia

 De hecho, no hay ningún otro estado más que éste; los otros tres estados mencionados tienen su origen en la ilusión  y sólo aparecen como consecuencia de la ignorancia que vela la posición del sujeto.

La superación de esta ignorancia otorga únicamente realidad a ese estado de conciencia pura, más allá del ego fragmentario .Se trata de un conocimiento carente de pensamientos y representaciones,  el estado de “éntasis” en el que el meditante ya no es consciente ni siquiera de meditar. En tal estado, la distinción entre el sujeto meditante y el objeto de la meditación se pierde.


4. Oscilaciones mentales

La cuestión que nos planteamos ahora es si disponemos de alguna indicación o dato de experiencia que permita una aproximación empirista a ese cuarto estado.

5. Actividad cerebral y conciencia del tiempo

La ciencia actual establece que la actividad cerebral se produce en virtud de patrones de oscilaciones de naturaleza bioeléctrica, y que estas ondas presentan básicamente cuatro ritmos o frecuencias diferentes. Todos los psicólogos y neurólogos admiten actualmente que, según opere la conciencia en uno u otro de tales ritmos cerebrales, el individuo se siente más o menos agitado y, lo que es más significativo, tiene una vivencia distinta del tiempo.


6. Patrones neuronales

La actividad neuronal exhibe cuatro patrones básicos de frecuencia oscilatoria clasificados como ondas cerebrales beta (a una frecuencia de 14-30 Hz), alfa (8-13 Hz), zeta (3-7 Hz) y delta (1,5 Hz), y cada uno de ellos puede identificarse con distintos niveles de actividad de la conciencia.

Las ondas beta están relacionadas con los estados de peligro y con las reacciones de miedo, angustia, dolor o frustración; las alfa tienen mayor relación con los estados de placer o tranquilidad acompañados de sensaciones de relajación y bienestar; las zeta se producen en situaciones de planteamiento y solución de problemas, en esfuerzos de memorización o en cualquier impulso creativo para planificar una acción futura, etc.; finalmente las ondas delta, de baja frecuencia, están relacionadas con el estado de sueño profundo y con esa extraña actividad (más bien inactividad) de la conciencia conocida como samadhi, que tanto ha ocupado a los pensadores orientales
Puede decirse que el funcionamiento de la conciencia depende del patrón de frecuencia de las ondas cerebrales y que esta frecuencia puede controlarse, sosegarse e incluso detenerse por medio de ciertas prácticas, como la detención controlada de la respiración la fijación de la conciencia en un punto  o la introversión de la actividad racional  entre otras.

7. El camino hacia lo Real

La agitación permanente de la conciencia cognoscitiva revela una capacidad inagotable de inquirir y preguntar; cuando esta capacidad se dirige hacia su propio interior y se indaga de manera profunda en la naturaleza y en el origen de la propia conciencia, esta búsqueda tenaz puede conducir a la detención de las oscilaciones mentalesEste es formalmente el método que los vedantinos denominan jñâna-mârga, o âtma-vichâra, el camino que conduce a la evidencia de lo Rea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario